El tiempo pasa, “time goes by” ya lo anunciaban en la banda sonora de Casablanca. Pasa inexorablemente y lo hace para todos, incluso para los preciados vinilos, que poco a poco envejecen en nuestras estanterías. Hoy Música Oskura os invita a un viaje nostálgico al pasado, para rememorar preciadas joyas sonoras, que en este año convulso en el que estamos, cumplen 50 años. Fue en 1972, cuando aparecieron en el mercado discográfico algunos de los discos que nos acompañaran en el programa. No están todos por razones obvias, pero si un buen puñado de imprescindibles.

Y LOS GANADORES SON…

Lou Reed. Transformer, segundo trabajo del músico neoyorquino y obra clave, que todo aficionado debe tener.

David Bowie, The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders from Mars, fue su quinto álbum de estudio y uno de los más aclamados de su carrera.

Doobie Brothers. Toulouse Street. Segundo trabajo para el grupo californiano y el primero en incorporar doble batería. El nombre está inspirado en una de las calles del barrio francés de New Orleans.

Paul Simon. Paul Simon. Segundo trabajo como solista, tras romper el dúo Simon & Garfunkel. Un puñado de buenas canciones, en ocasiones intimistas con importante reconocimiento en el Reino Unido, Japón y Noruega, además de su natal Estados Unidos.

ZZ Top. Rio Grande Mud. Primero años para este trio roquero de Texas. Los barbudos configuraron este segundo disco en su carrera con un sonido más crudo y guitarrero.

The Rolling Stones. Exile on Main St. Producto de la etapa loca del grupo en el sur de Francia,  a donde tuvieron que huir de las islas británicas, para evitar pagar al fisco. Sin duda uno de sus mejores discos y realmente imprescindible.

Uriah Heep. Demons & Wizards. Banda de culto del panorama inglés de los años 70, donde Easy Livin, se ha convertido en un clásico de todos los tiempos y tema que no falta en sus actuaciones de directo.

Yes. Close to the Edge. El rock progresivo estaba de moda a comienzos de los 70 y el grupo Yes era, junto con Genesis, uno de sus exponentes más importantes. El quinto álbum del grupo apostaba por largos desarrollos y consiguió el éxito inmediato nada más salir al mercado. Curiosamente fue el último trabajo del batería Bill Bruford, que abandonaba la formación.

Jethro Tull. Thick as a Brick. Indispensable en la historia del rock sinfónico o progresivo y obra magna del grupo inglés liderado por Ian Anderson. El álbum esta caracterizado por tener una única canción, una obra solo interrumpida por la duración de cada cara del vinilo. Destaca también por su original portada, que en su versión original se desplegaba e imitaba un periódico de pueblo, el St. Cleve Chronicle & Linwell Advertiser.

Alice Cooper. School’s Out. El excéntrico personaje de Detroit presentaba hace 50 años, este álbum inspirado en historias de colegio, donde la portada imitaba un gastado y maltratado pupitre. Un clásico que se ha mantenido en el tiempo y referente en la música rock americana.

Elton John. Honky Château. Quinto trabajo para el británico que el suponía el primer número uno en la listas americanas. Un éxito grabado en un castillo francés, con músicos de la talla de Jean- Luc Ponty.

Cat Stevens. Catch Bull At Four. Músico, cantautor y compositor británico, de enorme éxito en la década de los años 70, hasta el año 1977, cuando decidía dejar temporalmente la música y convertirse al islam. Curiosamente este disco fue grabado en el mismo castillo francés que utilizo Elton John.

Wishbone Ash. Argus. Cerramos Música Oskura, con otro clásico de hace cincuenta años. Este álbum fue el tercero de una banda caracterizada por el uso de las guitarras gemelas. La portada, con un guerrero contemplando el horizonte fue obra del grupo de diseño Hipgnosis.